¿CÓMO ACTUAR CON LOS NIÑOS IMPULSIVOS?



La impulsividad se asocia con una falta de capacidad para poner límites por parte del niño. Dicho de otro modo, la paciencia excede el límite y el niño explota.
El problema es que, en líneas generales, cuando el niño explota nunca lo hace ni con las personas adecuadas ni en el momento apropiado.
Este tipo de niños, generalmente tiene problemas para meditar las situaciones antes de actuar.

Los niños impulsivos tienen ciertas características en común:
  • Tiene comportamientos desubicados para llamar la atención 
  • No les agradan las reglas y tienen dificultades para seguirlas 
  • Patean, golpea, pelean y discuten con otros niños 
  • Primero actúan, después piensan 
  • No guardan el turno que le corresponde. No pueden esperar. 
  • Interrumpen y estorban a los demás. 
  • No tienen autocontrol. 
  • Reaccionan de una manera exagerada frente a las frustraciones, errores o decepciones. 
  • No tienen en cuenta que las acciones de ellos tienen consecuencias sobre los demás. 
  • A menudo estos niños son conscientes de lo que les ocurre pero no pueden evitarlo. 

¿Cuáles pueden ser las causas de la impulsividad en los niños?

  • El Déficit de atención con hiperactividad (TDHA) es un trastorno neurológico que tiene, como consecuencia la impulsividad en los niños.

  • Dificultades en el funcionamiento ejecutivo. Las funciones ejecutivas ayudan a que el niño pueda organizar su mundo interno y externo. Una carencia en el desarrollo de las funciones ejecutivas, puede ser el causante de un niño impulsivo.

  • Trastornos del lenguaje y/o de la comunicación. Si un niño presenta un retraso en la comunicación con otros, puede sentirse amenazado por su grupo de pares (por quedar fuera del grupo) y, de allí, reaccionar de forma impulsiva.

  • Trastornos en la alimentación. Un exceso de glucosa, hidratos de carbono o una alimentación desbalanceada y sin horarios, puede alterar el sueño del niño, provocando respuestas impulsivas y/o agresivas. En este punto no hay que descartar que ciertos parásitos pueden alterar de forma considerable a los niños y producir reacciones impulsivas en ellos.

¿Cómo debemos actuar frente a niños impulsivos?

  • Investiga lo más que puedas para poder ayudar al niño.

  • Habla con el padre/madre del niño. Si se trata de tu propio hijo el que tiene actitudes impulsivas, es conveniente que hables con la maestra de la escuela. De este modo podrás tener un panorama más amplio de lo que le sucede al niño durante todo el día.

  • Realiza una consulta con el médico de cabecera del niño. Él podrá descartar alguna patología del organismo.

  • Consulta con un equipo psicopedagógico. Quizás el niño presente alguna dificultad en el ámbito del aprendizaje. Esto es frecuente en caso en que el niño no pueda adaptarse a un nuevo entorno escolar, esté atravesando una crisis o tensión por algo. Además puede tratarse de una dificultad que le avergüence y, por tal razón, reaccione de forma impulsiva.

  • No descarte la posibilidad de acudir a unas sesiones psicológicas para indagar dentro de su psiquis.

En cualquiera de los casos un niño impulsivo es una señal de que algo no está funcionando de la forma adecuada. Por tal razón debemos tomar cartas en el asunto y actuar hasta hallar el problema que esté alterando su conducta.

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