BENEFICIOS DE AGACHARSE PARA HABLAR CON LOS HIJOS
Agacharte para hablar con tu hijo: Con mucha frecuencia hablamos con nuestros hijos sin prestar atención al modo de hacerlo. Queremos que nuestro mensaje quede claro y por eso nos centramos en decirlo, en las palabras. Pero la comunicación es mucho más que las palabras, de hecho a menudo las palabras pierden valor si no se acompañan de actitudes que promuevan la comunicación y enfaticen el mensaje.
Cuando nos agachamos para hablar con nuestros hijos demostramos una actitud que favorece la comunicación, dejamos de centrarnos en nosotros y favorecemos que el niño forme parte de la comunicación. Agacharse para hablar con los hijos no es una tendencia pasajera, es mucho más que eso, es una actitud que favorece la comunicación.
Agacharte para hablar con tu hijo y favorecer la comunicación
A menudo tendemos a hablar con los niños, pero pocas veces nos comunicamos de manera efectiva con ellos. Muchos padres y madres se quejan de que sus hijos no escuchan, de que no prestan atención a los que les dicen, etc.
Pero ¿prestamos atención a la manera de comunicarnos con los niños? Imagina que alguien te habla sin mirarte, imagina que tú estás haciendo cualquier otra cosa que te parece muy interesante y alguien te habla desde otra altura y ni si quiera te mira. Sería difícil atender a lo que nos dicen.
Los niños viven rodeados de un mundo lleno de estímulos, son muchas las cosas que llaman su atención, y por su naturaleza exploran el entorno que les rodea. Es natural y sano que el niño este activo y explorando. No siempre está en predisposición de escucha y si le hablamos cuando no hay predisposición difícilmente conseguiremos comunicarnos.
Es importante conocer la naturaleza y las características del niño, para comprender que cuando no nos escuchan, muchas veces no es porque no quieran, es porque no están en predisposición para ello y nosotros como adultos no favorecemos la comunicación.
Agacharse para hablar con tu hijo y utilizar la empatía
Pero cuando nos agachamos para hablar con el niño, conseguimos mucho más que favorecer su atención. Además mostramos una actitud de empatía que favorece la escucha activa y la comunicación. El niño se siente seguro, se siente al mismo nivel para poder comunicarse con nosotros.
La comunicación ha de ser de igual a igual, si estamos por encima difícilmente podemos practicar la escucha activa o demostrar empatía.
El adulto debe poner normas y límites a los hijos, no se trata de no hacerlo, pero debe comunicarse con sus hijos mirándolos a los ojos y demostrándoles que les escucha.
Beneficios de agacharse para hablar con los hijos
- Favorecemos la comunicación, ya que el niño puede prestarnos atención y comprender mejor lo que le decimos.
- Demostramos empatía, si me pongo a tu altura puedo ponerme en tu lugar.
- Promovemos la comunicación, el niño se siente seguro al mismo nivel y se percibe escuchado, está preparado para hablar y comunicarse.
- Nuestra actitud favorece la comunicación y la actitud del niño será positiva, no se sentirá atacado y responderá con apertura.