LOS NIÑOS Y EL CELULAR
Una madre nos escribe preocupada
porque descubre, por casualidad, que su hija de apenas 7 años recibe mensajes
SMS de un desconocido en su teléfono móvil. El desconocido la invitaba a tener
sexo y le explicaba lo que eso significaba, con palabras sencillas para que la
niña entendiera. La madre le quitó el teléfono, intentó averiguar quién era la
persona, pero no lo consiguió. Regañó a su hija por haber entablado tal
conversación, y le prohibió incluso a que accediera a Internet. Se culpabiliza
por no haber tenido más cuidado con eso. Y yo sigo preguntándome: ¿Para qué quieren los niños teléfono móvil?
¿Necesitan los niños un teléfono móvil?
Mi hija de 10 años también me
pide un móvil repetidas veces. Le pregunto para qué, y ella me dice que por que
sí. Que porque se puede sacar fotos, divertirse con los juegos, y llamar
algunas veces a las amigas que ya tienen móviles. Para decir la verdad, nada de
lo que diga mí hija me convence. No considero conveniente que los niños
dispongan de teléfono móvil. No lo necesitan para nada, en absoluto. Lo que sí
creo es que se ha creado un círculo vicioso entre todos los niños del colegio, y peor, con la firma de algunos
padres. Como a mí amiga se le ha comprado uno, a mí también me lo tienes que
comprar, y así se forma una corriente sin sentido alguno.
¿Los niños tienen la capacidad y
responsabilidad suficientes para hacer un uso adecuado de un teléfono móvil?
Pues creo que no. No entiendo qué hace una niña de 7 añitos con un aparato por
el que puede recibir todo tipo de mensaje, spam, etc. No hay cómo controlar las
llamadas que una niña pueda recibir en su móvil. Supongo que los padres no
estarán ni podrán vigilar estas entradas las 24 horas del día. El control
debería ser de la niña, pero si no está preparada para ponerlo en práctica, no
debe tener un móvil ni nada que no lo necesite de verdad.
Tenemos que tener más control
sobre todo lo que regalamos a nuestros hijos.Un móvil no es un juguete . Los modismos muchas veces nos hacen cometer grandes
errores. Errores que pagarán nuestros hijos, los que aún no tienen la capacidad
ni la razón para decidir. Se debe evitar todo el consumo por capricho, y establecer
límites, siempre. Debemos demostrarles que si no tenemos el carrazo
que tiene el vecino no quiere decir que seamos peores personas que ellos.
Respeto a los padres que regalan un móvil a sus niños, a los que por alguna
necesidad (enfermedades,
urgencias) les enseñan a hacer un uso responsable del aparato. Pero también
respeto a los que como yo, enseñan a su hijo que para vivir no se tiene que
crear demandas. Ellas vendrán cuando tengan que venir. En fin, todo es muy
relativo.