LAS FORTALEZAS EN LOS NIÑOS QUE DEBEMOS DESARROLLAR
¿Por qué algunas personas deciden, frente a una dificultad, buscar e investigar las respuestas saliendo de los problemas, mientras que otras solamente esperan de modo pasivo a que la ayuda llegue?
La diferencia entre una actitud y la otra, reside en el modo de comportarse, de actuar frente a la adversidad. Y como siempre, esto es consecuencia de la educación recibida en el hogar. Una educación basada en la psicología positiva será aquella que busque respuestas y vea en cada problema una oportunidad para mejorar y no como un problema en sí mismo. Esto plantea Martin Seligman, creador de la psicología positiva.
La respuesta está en nuestro interior
Es cierto: no sabemos qué tipo de pruebas serán las que les toque atravesar a nuestros hijos de niños, adolescentes o adultos. Lo que sí es cierto es que, si ellos saben cómo buscar en su interior la respuesta, sabrán cómo salir de cada una de las dificultades o pruebas de la vida. Esto es lo que aseguran desde la psicología positiva, rama de la psicología que se ha enfocado en develar cuales son las características y especialmente las fortalezas de cada persona.
Las fortalezas de una persona, un ADN cargado de positividad
Cada persona es única e irrepetible. Por eso, no todos reaccionamos del mismo modo frente a los problemas. Lo bueno de las fortalezas es que se pueden identificar (descubrir) y reforzar a lo largo de la vida. Si bien estas no se hallan en nuestro ADN como tal, es decir, no es posible observar las fortalezas en un examen de sangre o de orina, sí es algo que acompaña a cada persona durante toda su vida. De hecho, las fortalezas, son tan importantes que ayudan a construir nuestra personalidad.
La importancia de la personalidad positiva
Una personalidad positiva será aquella que reconozca sus fortalezas y debilidades; que haya podido trabajar para reforzar las primeras y para hacer frente a las segundas. Pero, además de lo antes dicho, es preciso que los niños aprendan a ser tolerantes con la adversidad. Es decir, que aprendan a tener tolerancia a la frustración.
Fortalezas en un niño que debemos desarrollar
Hemos oído en más de una oportunidad que la educación, comienza en el hogar y continúa en la escuela. Nada más real que esto. Por eso, queremos contarte las fortalezas que debemos inculcar y reforzar en nuestros hijos para que ellos logren internalizarlas y puedan actuar en diferentes momentos de sus vidas. Veamos, a continuación, cuales son las fortalezas de un niño que debemos trabajar en el hogar.
Amar el conocimiento y la sabiduría
Una persona sabia es aquella que ama el aprendizaje, es creativo, tiene una perspectiva de cada situación y ha podido establecer un juicio justo en cada ocasión. Inculcar estas características hará que los niños aprecien el conocimiento, lo que abrirá puertas no solo en el aspecto profesional o laboral sino social y personal también.
Fomentar el amor al prójimo (ser humano con otras personas y animales)
Con esto hacemos referencia a la capacidad de poder reconocer en el otro aquello que le aflige, poder entenderlo y, en tal caso, ayudarlo. Esto no es ni más ni menos que la empatía. Trabajar la empatía en los más pequeños puede ser todo un desafío, especialmente antes de los 4 o 5 años puesto que es luego de esta edad que los niños comienzan a tener en cuenta al otro; su dolor, su angustia o alegrías. No obstante, no debemos dejar este aspecto de lado.
Enseñar lo que es justo de lo que no lo es
Es importante que les transmitamos, desde pequeños, aquellas cosas que resultan ser justas y aquellas injustas. Generalmente los niños tienen un juicio bastante acertado de manera intuitiva (especialmente a los 4 o 5 años). Sin embargo, reforzar este aspecto teniendo en cuenta la responsabilidad sobre cada uno de nuestros actos, la justicia (es decir actuar con justicia y rectitud más allá de los propios intereses) hará que los niños hagan los correcto en todo momento.
Ser valientes
Es importante, también, fomentar el espíritu de aventura y enfrentar los propios miedos. Es decir, es importante que los niños sean valientes, mantengan el entusiasmo por sus proyectos, persigan y alcancen sus propias metas.
Tener autocontrol
Otro aspecto a destacar es aquel que tiene que ver con la capacidad de mantener la propia calma en situaciones estresantes. Es decir, aprender a tener autocontrol.
Buscar metas reales, alcanzables que hagan felices a los niños
Este aspecto o característica tiene que ver ayudarles a encontrar lo que realmente les haga felices a ellos. En este enfoque se incluyen características como la gratitud (es importante agradecer aquello que tienen), la perseverancia (no darse por vencido y luchar por lo que ellos quieren), ser positivos (más allá de las dificultades, mantener una actitud optimista), tener una visión más amplia que la material (estimular en ellos aspectos que les hagan reconocer los valores de cada persona) y actuar con sentido del humor.
¿Cómo desarrollar las fortalezas de un niño?
- Enséñales a ser carismático y a ayudar a otros sin esperar nada a cambio.
- Transmítele que los errores sirven para aprender, que no deben ellos avergonzarse sino, no repetir el mismo error. Sin errores no hay aprendizaje alguno.
- Enséñales a reconocer las emociones propias y las ajenas.
- Un niño que escucha es un niño que primero ha sido escuchado. Permite que en tu hogar exista un momento para que los niños sean escuchados y aprendan a escuchar también.
- Relacionar el juego con el aprendizaje. Utiliza el juego como medio para aprender y no solo como una diversión o distracción. Existen centenares de juegos que se utilizan para estimular el conocimiento y el aprendizaje. Lo bueno de los juegos en el aprendizaje es que los niños no sienten que están aprendiendo y, de este modo, puede trasmitir aquello que han aprendido jugando a otros niños.
