DESARROLLO DE LA COMUNICACIÓN Y LENGUAJE INFANTIL

 

Hoy hablamos de comunicación y lenguaje y su desarrollo en la infancia, intentaremos explicar el desarrollo fonológico, léxico y semántico en niños.

La adquisición del significado de las palabras, su asociación, así como la apropiada pronunciación del léxico son elementos de vital importancia para poder adaptarse social y personalmente, pues son habilidades que se utilizan para ser entendidos por los demás.

Nuestra labor como docentes y padres es vigilar y estimular el desarrollo de la comunicación y lenguaje en nuestros alumnos e hijos para adelantarnos a posibles problemas que se puedan presentar en el crecimiento del niño.

Desarrollo de la comunicación y lenguaje infantil

El lenguaje es un aspecto que goza de gran importancia durante el crecimiento de un individuo. El proceso que conlleva su desarrollo goza de una significativa complejidad y tiene lugar en las interacciones de los niños con el ámbito en el que se desarrollan.

Por ello, el entorno en el que el niño crece, juega y se desarrolla es un elemento de vital importancia en el desarrollo del lenguaje y la comunicación. El lenguaje se conforma debido a la enseñanza al niño de modelos lingüísticos apropiados y a la exposición a situaciones que le permitan practicarlo. El mismo, cuenta con algunos elementos de gran importancia: La fonética, la fonología, la semántica y el léxico.

Definamos el objetivo de estos elementos

• La fonética busca estudiar los distintos sonidos de la lengua. Al mismo tiempo, la fonología se encarga del estudio de la forma en la que se organizan los sistemas sonoros que componen el lenguaje.

Hay que tener en cuenta que en el desarrollo de las habilidades de la fonología, pueden encontrarse unas estructuras de desarrollo y un orden de aparición de las mismas bastante definido. Sin embargo, la velocidad con la que se adquiera la fonología difiere entre cada individuo.

• La semántica que se refiere a la manera en la que se organizan los significados dentro del lenguaje. En otras palabras, la semántica trata del significado de las palabras y a las relaciones que las mismas establecen entre sí y con el vocabulario de un idioma.
• El léxico se refiere a un conjunto de palabras que se utilizan en una lengua específica, así como en una región en particular. Por ello, resulta muy importante que los pequeños conozcan y dominen el léxico de su idioma y del lugar en el que crecen.

El desarrollo de la fonología

Dentro del proceso de comunicación y lenguaje, el desarrollo fonológico inicia antes de la emisión de las primeras palabras, con los llantos y los distintos sonidos que producen los bebés hasta llegar al balbuceo. Desde su nacimiento hasta alrededor de los seis o siete meses, los bebés producen una serie de sonidos como medio de comunicación. Entre estos se destacan: Los arrullos y el llanto. Aparecen de acuerdo a los estados de ánimo del bebé. Los arrullos se manifiestan ante situaciones agradables, mientras que el llanto es utilizado para expresar desagrado o necesidad (Como comer, dormir, entre otros).

El siguiente paso en la evolución fonológica son los sonidos consonánticos, como el parloteo o sonidos de fricción. En esta etapa, el pequeño empezará a hacer vibraciones con los labios y la lengua. Al mismo tiempo, puede empezar a variar el volumen y la entonación de los sonidos que genera.

Aproximadamente a partir de los siete meses, empezarán los balbuceos. Esta etapa se caracteriza por la capacidad del pequeño de combinar las consonantes con las vocales que se repiten de forma periódica, por ejemplo “Papapapa”, “Tatatata”, entre otros.

Los balbuceos variados aparecen cerca de los diez meses, cuando los niños comenzarán a combinar distintas consonantes y vocales. En esta fase del balbuceo, las consonantes que utilizan y la forma en la que las emplean empiezan a mostrar vagas similitudes con la lengua materna.

De los diez meses en adelante, el balbuceo comenzará a convertirse en pseudopalabras. Estas empiezan a diferenciarse del balbuceo ya que sus sonidos (Fonética) son un poco más estables, aunque no llegan al nivel de las palabras.

Algunas de estas pseudopalabras pueden ser inventadas por los pequeños para referirse a alguna situación particular. Estas preceden a la aparición de las primeras palabras.

Las primeras palabras y la fonología

Como se ha mencionado anteriormente, los tiempos del proceso para desarrollar la comunicación y lenguaje difieren entre cada niño. Sin embargo, comúnmente alrededor de los doce y los dieciocho meses de edad, aparecerán las primeras palabras. Estas tienen características fonológicas distintas a las que emiten los adultos.

Es común que los padres del pequeño sean los únicos capaces de comprender a qué se refiere cuando utiliza sus primeras palabras. De esta manera, poco a poco irá aprendiendo cómo combinar las vocales y las consonantes en sílabas cada vez más complicadas.

Aprenderán gradualmente la fonética de la lengua y su entonación se hará más similar a la de los adultos conforme la practiquen. Alrededor de los cuatro años, el repertorio fonológico será sumamente similar al de los adultos. Sin embargo, el proceso de adquisición del mismo continúa por muchos años más.

El desarrollo de la semántica y el léxico

Seguimos con el desarrollo de la comunicación y lenguaje en niños, merece la pena recordar que la semántica estudia la forma en la que el lenguaje es organizado, la relación de las palabras y su significado. Este proceso es de gran importancia para el desarrollo del lenguaje infantil.

Cuando se inicia el aprendizaje del léxico y la semántica, la separación de las palabras es uno de  los primeros retos que se debe superar. Es decir, dónde termina una palabra y dónde comienza la otra. Al mismo tiempo, es necesario que aprendan a asociar los significados de las palabras con los sonidos.

Los niños empiezan a comprender el significado de las palabras antes de poder modularlas, alrededor de los nueve o diez meses. Por ejemplo, responden a su nombre y enfocan su atención a él cuando lo escuchan o detienen lo que están haciendo cuando escuchan la palabra “No”.

Como se dijo con anterioridad, las primeras palabras aparecen en torno a los doce o dieciocho meses. En este léxico inicial de los pequeños, los nombres, tanto de objetos como de personas, son las palabras que se presentan con mayor frecuencia, se presume que se debe a que su complejidad lingüística es menor.

Entre estos destacan los nombres de los elementos básicos que se encuentran en su entorno. Entre estos se pueden mencionar palabras como: Nombres de personas, biberón, juguete, el nombre de algún alimento, agua, entre otros.

Otras palabras que comúnmente se encuentran en el vocabulario inicial de los niños son acciones simples, como: beber, comer, dibujar, jugar, entre otras. Así, empiezan a asociar sonidos con significados.

La explosión del léxico

Dentro del periodo de comunicación y lenguaje, entre los dieciocho y los veinticuatro meses, los niños experimentan un rápido crecimiento de su léxico, que se denomina “Explosión del léxico”. Hasta este punto, los pequeños comúnmente utilizaban las palabras de forma aislada, sin embargo, es aquí cuando aparecen las primeras combinaciones de palabras.

Lo que ocurre en esta etapa es básicamente que los pequeños descubren que tanto las acciones como los objetos pueden ser nombrados. Además, se percatan que las palabras pueden ser de utilidad para atraer la atención de alguna persona.

Al mismo tiempo, dejan de emplear las palabras para una sola función y les otorgan varios usos. Por ejemplo, si el pequeño comprende el concepto de la palabra “Galleta”, puede pedir una galleta, preguntar dónde están las galletas, decir que se han terminados las galletas, entre otros. A partir de este momento, el léxico del niño crecerá rápidamente.

De esta forma, los niños van añadiendo palabras a su léxico conforme van aprendiendo su significado. Debido a esto, es de suma importancia asegurarse de que crezcan en un entorno que les permita interactuar con distintos elementos y descubrir el significado de nuevas palabras.