¿CÓMO DETECTAR QUE MI HIJO TIENE UNA BAJA AUTOESTIMA?

La autoestima es la conciencia que una persona tiene de su valor, la sensación de aceptarse y quererse como es. Por el contrario, una baja autoestima puede producir sentimientos de inferioridad, dolor, angustia, ansiedad, culpa o impotencia.

La autoestima opera en nuestros hijos en todas las esferas de su vida: en el ámbito familiar, en el académico, en el social y en su imagen personal.

Hay ciertos periodos en la vida donde el niño se puede sentir vulnerable y/o con poca confianza en sí mismo y su autoestima disminuye, como un cambio de colegio, una separación de los padres o al entrar en la adolescencia.

 También ocurre que en alguna esfera de su vida, su autoestima sea más baja que en otras, sin embargo, lo esperable es que, con el paso del tiempo y tras superar estas pequeñas “crisis” la autoestima vuelva a restablecerse.

En caso de no ser así y que el niño se comporte con baja autoestima en casi todas las esferas de su vida, puede llegar a generar problemas como aislamiento, depresión, anorexia, conductas agresivas, abuso de drogas, entre otros.

Por ello la importancia de detectar a tiempo si nuestros hijos nos están dando indicios de mantener una baja autoestima. He aquí unas claves para aprender a reconocerla.

Claves para detectar una baja autoestima :

• Tiene miedo de muchas cosas. Son generalmente niños asustadizos, que prefieren situaciones predecibles y tranquilas a tomar riesgos. Son niños que prefieren evitar las situaciones temidas que hacerles frente.

• Se frustra con facilidad. Pueden tener poca tolerancia a la frustración y si algo le sale mal, prefiere abandonar la tarea ante la menor dificultad. Abandona con facilidad, lo que le confirma su baja autoestima.

• No se gusta así mismo. Son niños que no se gustan, no se aceptan, no se caen bien, no les gusta la imagen que les devuelve el espejo y esto se refleja en su conducta y en su manera de ser.

• Cree que los demás son mejores. No importa que los demás puedan decirle cosas buenas de sí mismo, no se lo cree, porque es incapaz de ver cosas positivas en sí mismo. Simplemente da por hecho que los demás son mejores.

• Carece de opinión propia. No se conoce bien a sí mismo, por lo tanto, piensa en función de agradar a los demás, más que en pensar acerca de lo que quiere o necesita.

• Maximiza sus defectos, minimiza sus cualidades. Son niños pesimistas, que creen que todo lo malo les pasa a ellos, que son peor que todos los demás y les cuesta ver las cosas positivas de sí mismos y sus puntos fuertes.

• No cuida bien de sí mismo. Como falta de higiene personal, descuidos, caídas frecuentes, incluso lesiones hechas por ellos mismos.

• Interacción social pobre o conflictiva. Pueden ser niños muy tímidos que les cuesta mucho trabajo relacionarse con su grupo de pares, tratan de esconderse o pasar desapercibidos. También puede pasar que se relacionen, pero de una manera conflictiva o deficiente, lo que hace que se desilusionen fácilmente de la gente.

• Conductas agresivas. Se da en varios casos que los niños muy violentos y conflictivos, intentan ocultar una autoestima baja. En este caso la frustración por no ver nada agradable en ellos se proyecta hacia los demás con sentimiento de rabia.

El diálogo interno

El diálogo interno es lo que nos decimos a nosotros mismos y tiene una relación directa con la autoestima.

Somos lo que pensamos de nosotros mismos

Si percibimos hostilidad y vivimos bajo el yugo del miedo, entonces lo que pensamos y sentimos será negativo, destructivo, catastrófico y/o generalizado. Si esta hostilidad va dirigida hacia uno mismo, nuestro dialogo interno no será reconfortante o dirigido hacia buscar nuevas alternativas, sino estará plagado de culpabilidad y de falta de aceptación.

El diálogo interno ante un fallo:

Autoestima adecuada	Baja Autoestima
Yo he hecho: He hecho una tontería, he dicho una mentira	Yo soy: Soy tonto, soy un mentiroso
Algo puntual: Hoy se burlaron de mí, ayer no me salió bien el ejercicio	Siempre: Todo mundo se burla de mí, Nunca me salen bien las cosas, soy un fracaso
Se puede modificar: Me enfadé con Pedro, pero le he pedido disculpas, Hoy perdimos el partido, pero mañana vamos a por todas	Irreversible: No soy buen amigo, Nunca vamos a poder ganar, somos muy malos
Algo para aprender: No lo he hecho bien, pero quiero hacerlo mejor la próxima vez	Algo para reprochar: ¿Para que intentarlo si me va a salir mal siempre? Por mi culpa el equipo no ganó ¿ves lo que provocas?
Autocrítica constructiva: ¿Qué cosas he hecho bien y cuáles tengo que mejorar?	Autocrítica destructiva: No hago nada bien, que desastre..
Lo comparte con alguien	Se lo guarda

Mucho se ha hablado acerca de cómo mejorar la autoestima de los niños y algunos recursos para trabajar con la autoestima.

Los padres somos un factor clave para detectar a tiempo y ayudarles a superar su baja autoestima inyectándoles una dosis de seguridad, confianza y ayudándoles a enfrentar sus miedos.

A modo de resumen, os dejo con los puntos más importantes para fomentar una buena autoestima en los niños:

• Acepta y valora a tu hijo por lo que es

• Respeta su individualidad como persona, sus tiempos, su forma de pensar y de sentir

• Corrige sus defectos con cariño, de forma positiva, sin insultar o culpabilizar

• Refuerza las conductas positivas

• Da a tu hijo responsabilidades adaptadas a su capacidad

• Pon límites firmes, claros y consistentes acerca de lo que puede y no debe hacer.