Es su niño/a invisible, ignorado?
Ese niño invisible, aquel que odia llamar la atención en clase
Ese niño/a que a los profesores y a sus propios compañeros les cuesta recordar su nombre
Aquel que nadie recuerda si estuvo en clase o faltó, quizás una semana entera
Ese niño/a que nadie escoge en los equipos de trabajo o de deporte
Ese niño/a que le gustaría tener una pintura para hacerse “invisible” y así evitar situaciones incómodas
Ese que, por no causar problemas se limita a seguir lo que hacen los demás
Ese niño/a que no podríamos dar una opinión de el/ella ¿Quién? Mmm……
Ese, que a nadie le cae mal, que no tiene problemas con nadie, ni siquiera le molestan, porque es como si nadie le viera.
Ese niño/niña que parece ser sólo espectador y nunca protagonista de su propia vida
Ese niño que prefiere inventarse una vida en su mente, antes que enfrentarse a la suya propia
Ese niño/a que pasado el tiempo no recordaremos su cara, ni le saludaremos en la calle, porque apenas y tendremos un recuerdo lejano de quien es.
Ese niño, esa niña…
- SI tiene cara y nombre
- SI tiene su propia opinión acerca de los demás, de sí mismo, de la vida..
- SI tiene sueños, ilusiones, fantasías
- SI tiene talentos escondidos, habilidades y virtudes
- SI desea relacionarse con los demás y tener amigos
- Miedo de mostrarse al mundo tal y como es
- Miedo a no gustar y ser rechazado, así que, mejor se aisla “voluntariamente”
- Miedo de sentirse vulnerable y frágil
- Miedo a equivocarse
- Miedo a decepcionar a otros
- Miedo a conocerse a sí mismo y ver que puede ser genuino.
- No causan problemas
- No presentan ninguna objeción a nuestras propuestas
- Apenas hacen ruido
- No nos llevan la contraria
- No se quejan por nada
- Son obedientes
Y este niño invisible ¿Cómo es tratado en su propia casa?
- Quizás también con indiferencia
- Quizás sus padres estén ocupados con otros hermanos ó con otros problemas “mas importantes”
- Quizás piensen que es sólo timidez
- Que es algo de la edad
- Quizás consideren que no dar problemas es sinónimo de estar bien.
- Evade cualquier conversación acerca de la escuela y de su relación con los compañeros
- Se recluye en su habitación
- No le gusta ir al colegio/instituto, aunque va
- No lo invitan a los cumpleaños
- Evita ir a centros concurridos, donde pueda encontrarse con compañeros
- No le gusta dar su opinión
- Le cuesta tomar decisiones
- Merece nuestra atención, aunque no la pida
- Desea que alguien le diga algo agradable, mejor en privado
- Necesita ayuda para saber aceptarse y quererse a sí mismo/a aunque no lo reconozca
- Requiere aprender habilidades sociales para poder adaptarse
- Guarda una herida, la de la indiferencia, que puede ser más grande que incluso si le acosaran.
- Tiene tanto o más que aportar que los demás niños, pero tiene mucho miedo de sacarlo a la luz.
Una reacción negativa es mejor que ninguna reacción. Preferiría que alguien me odiase a que no me viera. Al menos si me odia, no le soy indiferente.
Pero ese niño/niña permanece en la fría cueva de la indiferencia porque tiene MIEDO
Ese niño invisible va por la vida como un camaleón, mimetizándose con el medio, cambiando, para no ser “descubierto” y no llamar la atención.
Los adultos, profesores y padres, nos volvemos en cierta forma “cómplices” de la invisibilidad de estos niños/as, por nuestra propia ceguera o incluso por egoísmo:
Pero es muy probable que este niño en su interior esté sufriendo o peor aún, ya se ha inmunizado del dolor y ya ni siquiera le interesa descubrir quién es y que quiere, ya ha dejado de luchar.
Detectar un niño invisible/ignorado, puede ser difícil para los padres puesto que el niño no lo va a manifestar y no se va a quejar abiertamente de ello, pero podría tener algunas conductas que no deberíamos pasar por alto como:
Esa niña, ese niño invisible……
¿Tú, profesor/padre/madre/compañero sabes cuál es ese niño? ¿A qué esperas para actuar?
Hugh Prather